Konesh soluciones es una empresa dedicada a la tecnología y a la consultoría especializada en la facturación electrónica.
Parecería, parafraseando a Carmen Nozal, “un milagro” que una empresa de esta naturaleza muestre interés en apoyar a la cultura y al arte. Sin embargo, y después de conocer muy bien al director general (soy su hija), puedo asegurar que este interés resulta no únicamente coherente sino inevitable.
Konesh es una palabra maya que significa “estamos juntos”, y esta etimología se ha vuelto la base de un proyecto de empresa que, por sobre todas las cosas, se ha mantenido intacta en una premisa gigante: trabajar para garantizar lo bello. Así, en Konesh la poesía resulta necesaria porque sin ella no podría existir.
Participar en proyectos como lo son la impresión de este libro, representa una expansión de esta premisa primaria; con el paso del tiempo hemos aprendido que lo bello es mejor cuando se comparte, entendemos que estamos inmersos en un contexto en el que el acceso al arte se encuentra injustamente limitado, Konesh comprende la necesidad que existe en este país de luchar contra estos límites ya que consideramos que el acceso a la belleza es un derecho fundamental humano. Así, nos enorgullece de sobremanera poder ser parte del proceso de creación de este libro y esperamos que nuestra postura resulte contagiosa para que, en un futuro, no resulte milagroso que una colaboración de esta naturaleza exista.
La Poesía de Carmen se lee con todo el cuerpo; después de acercarme a este libro me queda la sensación de que son treinta años de sinestesia. Con una simpleza que solo otorgan el talento y el conocimiento profundo de la palabra, Carmen logra crear una atmósfera familiar en la que, gracias a su constante honestidad y capacidad de crear imágenes profundas, trasciende la sensación de que existe una relación con la autora y de que toda la historia, que es la suya, te la está contando a ti. Es de esos libros que rápidamente se vuelven compañeros y que se mantienen, subrayados, en la mesa de noche; considero de corazón que la experiencia que Carmen facilita en su poesía es memorable y modestamente le felicito y le agradezco con toda el alma.
Mar Gutiérrez Carughi (Lima, Perú, 1998). Estudiante de la licenciatura de Estudios e historia de las artes en la Universidad del Claustro de Sor Juana. Ha realizado voluntariados en instituciones como el Museo Nacional de Arte colaborando con el departamento de curaduría y a su vez ha trabajado a la par de coleccionistas particulares en la creación de archivos de obra.
Actualmente, desarrolla su proyecto de titulación junto con el escultor Miguel Peraza.
Semblanza y fotografía proporcionadas por Mar Gutiérrez Carughi.
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