Poemas de Hélio Pelegrino

Heráclito el oscuro

 

 

 

La piedra se mueve menos que la planta

 

la planta se mueve menos que el reptil, moviéndose sobre la

 

piedra.

 

El reptil se mueve menos que el leopardo, en la espesura de la

 

selva.

 

El leopardo se mueve menos que el hombre hambriento de

 

mundo y espacio.

 

Todo ser, al moverse, experimenta su desasosiego: arco

 

tendido en dirección a volverse.

 

La piedra tiene más sosiego que la planta.

 

La planta tiene más reposo que el reptil.

 

El reptil es más soñoliento que el leopardo.

 

El hombre, éste es puro insomnio, trabajo futuro, vuelo y flecha.

 

 

 

 

 

Alta mar

 

 

 

Esta agua es todas las aguas,

 

sin puerto, nombre o naufragio.

 

Rendida de espuma al viento,

 

sin dolor ni gozo.

 

 

 

Esta agua –ningún otro lugar–

 

es perdición sin locura.

 

En ella se disuelven tristeza,

 

memoria, tiempo y ventura.

 

 

 

Sin ley, rey, sin fronteras,

 

más allá del verbo y el silencio-,

 

ésta es la patria procurada:

 

incendio de todo –nada.

 

 

 

 

 

Plenitud

 

 

 

La piedra, el viento, la luz altiva,

 

el mar salado y eterno, el grito

 

del mergo, sobre el infinito

 

azul:

 

Dios no me debe nada.

 

 

 

 

 

Versión de Rafael Antúnez

 

 

 

 

 

 

 

 

Hélio Pellegrino (1924-1988) Nació en Belo Horizonte y murió en Rio de Janeiro. Hombre multifacético, ejerció la psiquiatría y el psicoanálisis, fue activista político, articulista y poeta. Minériros domados, reúne su poesía completa.

 

 

Fuente biográfica proporcionada por Rafael Antúnez

 

Fuente fotográfica: a terra é redonda

 

 

Rafael Antúnez es autor de La isla de madera y El hombre que amó a Matilde Urbach (novelas) Nostalgias de un fumador y La muchacha del verano (ensayos) y sus cuentos se encuentran reunidos en el volumen titulado Bajo la pálida luz de neón. Su libro más reciente es El emisario de Herodes (relato).

 

 

 

    Ha vertido al español El escarabajo y otros cuentos de Dino Buzzati, La noche misteriosa de Ledo Ivo, La sirena de Giuseppe Tomasi di Lampedusa, Casa de otros de Silvio D’arzo, Bestiario de amor de Richard de Fournival, El arte de la tentación (antología del ensayo inglés) y, más recientemente, Sobre la ciencia del onanismo de Mark Twain.

 

 

 

Semblanza y fotografía proporcionadas por Rafael Antúnez

 

 

 

 

 

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