
Chiaro il cammino, il destino
che mi ha condotto a te.
Ma quando ti ho raggiunto
ho perso
l’antico orientamento:
al cabotaggio
hai offerto come mappa
un labirinto.
Claro el camino, el destino
que me ha conducido a ti.
Mas cuando te encontré
perdí
la antigua orientación:
Al cabotaje
como mapa ofreciste
un laberinto
Ho cento modi per chiamare.
Con un fiocco
un neo
un profumo di stagione.
Gli uomini miei simili
rispondono al mio cenno.
Solo gli alberi del parco
non lo fanno.
Quando li chiamo
˗ se chiamo e sono altrove ˗
nulla si muove.
Come fiutassero
un vuoto, una finzione.
Tengo cien maneras de llamar.
Con un lazo
con un lunar
con un perfume de estación.
Mis semejantes
responden a mis señales.
Tan sólo los árboles del parque
no lo hacen.
Cuando los llamo
˗ si llamo y estoy en otro lugar ˗
nunca se mueven.
Como si olfatearan
Un vacío, un engaño.
Esercizio
Sono qui (come una volta a scuola)
a scomporre il difficile
in più innocue parti.
E sbaglio.
Invece di scindere il dettaglio
arto per arto, dovrei scavalcare
il cadavere riverso
non prenderti
parola per parola
ma uscire incontro al fuoco
saltando tutto il verso.
Ejercicio
Estoy aquí (como solía estar en la escuela)
para descomponer lo difícil
en pequeñas partes inocuas.
Pero me equivoco.
En lugar de separar los detalles
miembro por miembro, debería pasar
sobre el cadáver tendido
no desmembrarte
palabra a palabra
sino salir en busca del fuego
saltar sobre el verso
Del libro A grandezza naturale (Arcipelago Itaca, 2020)
Non crediamoci eterni
mi dice.
Io penso invece
che per vivere occorra
sentirsi immortali.
Per vivere occorre che amiamo
− sia attenti
sia arresi.
Ma il tempo inerente all’amore
è il presente.
“No debemos creer
que somos eternos”
me dice.
En cambio yo pienso
que para vivir es necesario
sentirnos inmortales.
Para vivir es necesario amar
− ya sea firmes
ya sea rendidos.
Mas el tiempo inherente al amor
Es siempre el presente.
Anamorfico II
Nessuna cosa immaginata
torna indietro.
Appena concepita
entra nel tempo, si dilata
per il piacere ambiguo di esser vista.
Infine destinata alla caduta
di nuovo si riduce
si fa muta
eppure mai si sveste
di un’anima sottile
Anamórfico II
Ninguna cosa imaginada
vuelve a regresar.
Apenas concebida
entra en el tiempo, se dilata
por el solo placer ambiguo de ser vista.
Finalmente destinada a la caída
de nuevo se reduce
se vuelve muda.
Empero, nunca se desnuda
de su ánima sutil
de su estupor.
Dopo millenni
ancora sabbia, ancora vetro:
cerchiamo il metro, la giusta misura
come se al centro
non fosse il desiderio
la strozzatura
che inverte il tempo
e irrisolto lo rinnova.
Después de milenios
aún arena, aún vidrio:
Busquemos el metro, la justa medida
como si en el centro
no estuviese el deseo
el estrecho
que invierte el tiempo
y -no resuelto- lo renueva.
Del libro Gli spostamenti del desiderio (Moretti e Vitali, 2023)
Tra le specie
Così insicuro l’uomo
così diverso
da tutto
se nel resto del creato
il primo contatto tra le specie
è fame, non stupore.
Ma l’uomo non è fatto
per la lotta.
Il suo indugiare
somiglia alla coscienza
o al suo sonaglio:
un salto
e poi la meraviglia.
Entre las especies
inseguro el hombre
diferente
a todo
si en el resto de la creación
el primer contacto entre especies
es hambre, no asombro.
El hombre no está hecho
para la lucha.
Su titubeo
se asemeja a la conciencia
o a su cascabel:
Un salto
y después la maravilla.
Del libro Tropaion (Puntocapo Editrice, 2020)
Opposti contigui
Come il sole cerca di notte
l’altro versante della terra
il familiare si sposta nell’ignoto.
Io e te che in guerra
lucenti ci amiamo
ora torniamo
a due paci lontane.
Lasciamo il letto
assolato e sfatto
come un assoluto che invano
cercherebbe un confine
come un dire infinito
che si ritira dal detto.
Opuestos contiguos
Como el sol busca en la noche
el lado oscuro de la tierra
lo familiar se desplaza hacia lo ignoto
Tú y yo que en la guerra
brillando, nos amamos
ahora atrás volvemos
como dos paces lejanas.
Dejamos el lecho
asolado y deshecho
como un absoluto que en vano
buscaría confines
como un decir infinito
que se desdice de lo dicho.
Affermano alcuni
che amare è guardare
in tempo reale
ciò che si è.
Per me invece
è vedere te
a dismisura
con dieci fusi orari addosso
come un gatto
grigio nero bianco marrone rosso
che a balzi esce da questo vulcano
e si porta sui baffi sul pelo
di tutto
nani giganti pesci con le ali carboni diamanti
e persino
le ragnatele del settimo cielo.
Afirman algunos
que amar es mirar
en tiempo real
aquello que uno es.
Para mí, en cambio,
es verte desmedido
con diez zonas horarias a espaldas
como un gato
gris negro blanco marrón rojo
que a saltos sale de este volcán
llevando en sus bigotes, en su pelo
de todo
enanos gigantes peces alados carbones diamantes
e incluso
las telarañas del séptimo cielo.
Del libro L’arte di cadere (Biblioteca dei Leoni, 2015)
Versión al español de Julio César Bustos y Raffaela Fazio

Raffaela Fazio (Arezzo, 1971). Pasó diez años en varios países europeos antes de instalarse en Roma, donde trabaja como traductora. Licenciada en lenguas y políticas europeas en la Universidad de Grenoble. Se especializó en la Escuela de Intérpretes y Traductores de Ginebra. Posteriormente, obtuvo un Diploma en Ciencias Religiosas y una Maestría en Patrimonio Cultural de la Iglesia de la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. En el campo de la iconografía, publicó Rostro de fe: una breve guía de las imágenes cristianas primitivas (2011). Es autora de varios poemarios. Entre los más recientes: El arte de caer (Biblioteca dei Leoni, 2015); Desatarás tus trenzas (Coazinzola Press, 2017); El último cuarto del día (La Vita Felice, 2018); Midbar (Raffaelli Editore, 2019); Tropaion (Puntoacapo Editrice, 2020); y Tamaño natural 2008-2018 (archipiélago de Ítaca). Hizo parte
de los poetas invitados al Festival Rionegro de Letras (2021) y algunos de sus poemas fueron publicados en Cuaderno de Traducción, veinte voces de la poesía italiana contemporánea 1949-2001(Colección Anverso 2021) con traducción al español a cargo de la poeta Marisol Bohórquez Godoy.
Semblanza y fotografías proporcionadas por de Julio César Bustos y Raffaela Fazio

Rodríguez-Bustos JC, crítico, editor, gestor y consejero cultural. Profesional en Estudios Literarios de la Universidad Nacional, máster de Creación de guión audiovisual de la Universidad de la Rioja. Es autor de “Álvaro Mutis como un pez que se evade”, “España entre la Realidad y el Deseo - Cernuda”, “España tierra ofendida - Neruda”, Jorge Rojas y el Arte de Amarte”, “Carlos Obregón bajo la sombra de los Olmos”, “Madame Bovary y el tratado de la mezquindad y otras emes”, “Doscientos años de compañía, poesía e independencias”, “Miguel Hernández, el Toro de España”, “Cervantes, hombre de armas y letras” y “César Vallejo, acerca a nos vuestro cáliz”. Gestor cultural, creador de los Encuentros Hispanocriticos, Encuentros Literarios, Semana de Poesía Central y la Noche de San Jorge. Consejero de Cultura en Bogotá desde el año 2012 y director de la Colección Anverso de poesía bilingüe.
Semblanza y fotografías proporcionadas por Julio César Bustos
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