Seis
El sol se pone
Algo de finitud se clava en mí y sangra.
El firmamento se abandona a las estrellas
¿Por qué no yo?
Once
Estamos hechos de limos donde nace el loto blanco.
Doce
Me trajeron flores
Se me ocurre jugar con los pétalos de una margarita
Me quieres
No me quieres
Poco
Mucho
¿Nada?
Me queda uno
Lo miro
Nos miramos
Me dice que si lo quiero vivo
Digo que sí
Ya no hay deshoje.
Dieciséis
Aún
Es tiempo
La herida puede esperar un poco
Te diré la palabra no dicha
Todavía
La que guardé para que la cultives
en tu vergel secreto.
Dieciocho
Primer paso en las afueras de la clínica
Apuntan los jacintos las anémonas los narcisos
Los árboles retoñan
Es casi primavera
Las golondrinas volverán a sus nidos
Me imagino
Yo misma
Golondrina.
Veintitrés
Tengo la tristeza de una estrella en agonía
Esta noche
La oscuridad me hace esperar la gracia desprendida
de una lámpara.
Veinticinco
Hazme una foto
Una que no desmienta eternidad ni herida
Una que pode mis últimas espinas
Una fotografía
Prueba de que alguien me quiso
Sin
Confines.
Veintiocho
¿Es la memoria un ataúd que trajinamos
por la sola ilusión de no morir vacíos?
Treinta
Cual viejo olivo
Torcido
Quebrado
Sumiso y noble al hondo goce de saberse vivo
Resisto.
Treinta y tres
Que una nevada cubra mis suturas
Es invierno
No pido mucho.
Treinta y tres
Gracias
Enigma
Que sin mirarme pasas
Sin decirme quién soy
Ni si al final
Lo que encendí
Renacerá de sus cenizas.
Treinta y ocho
En esta noche insomne
Siento que no hay mejor sueño que soñar que estamos
despiertos
Todavía.
Cuarenta y dos
No son mi sitio
No son mis horas
Son adioses
Sin dios alguno
Inciertos rumbos
Son estos que perforan las alas negras de la noche
sin dejar huellas
Sueño que vuelo en esos mundos de los que no se vuelve.
Cuarenta y tres
No puedo dormir
La enfermera de guardia me dice: ¿Sabe por qué la noche existe?
A mi mente acuden mil respuestas
Pero
No puedo hablar
No sé hablar
La noche no duerme
La noche soñará con su destino de ser noche – pienso –
¿Yo?
Afónica
Con sed de llanto
Sin lágrimas.
Poemas del libro Eclissi (Eclipses)
Norah Zapata-Prill (Cochabamba, Bolivia, 1946) es poeta, docente de lengua y literatura española en Cochabamba y en Madrid. Es miembro de la Academia Boliviana de la Lengua española y de la Academia Este Oeste de Curtea de Arges (Rumania, 2019); también es fundadora y presidente de la Asociación Casa de la Poesía “El cactus”, que organiza desde 2018 un festival internacional de poesía en Ostuni, Italia. Ha recibido 2 veces el Gran Premio de Poesía “Franz Tamayo” (La Paz 1973 y 1977) y en Italia, el primer Premio Especial de los derechos humanos en ocasión del 70 aniversario de la muerte de Anna Frank (2015). Ha publicado varios libros de poesía.
Semblanza y fotografía proporcionadas por Norah Zapata-Prill
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